HTC anunció que su agenda de actualizaciones a Android 4.1 Jelly Bean tendrá prioridad para los modelos de smartphones lanzados durante el 2012. El HTC One X y HTC One S ya han comenzado a recibir Android 4.1 con Sense+, pero HTC confirmó que los dispositivos con 512MB de RAM o menos no recibirán actualizaciones Jelly Bean.
Esto quiere decir que el HTC One V y el HTC Desire C no recibirán actualizaciones más allá de Ice Cream Sandwich, si bien seguirán recibiendo soporte, aún a pesar de que ambos celulares tengan menos de ocho meses. Por supuesto, la excusa del límite de 512MB es pobre, ya que el Nexus S corre Android Jelly Bean sin problemas - HTC asegura que la decisión intenta "asegurar que cada uno de nuestros productos tenga la experiencia de usuario óptima".
En cuando a otros dispositivos, HTC lanzará actualizaciones 4.1 a la línea actual, antes de comenzar a evaluar modelos anteriores, sin dar precisiones sobre fechas.