Durante el evento Google I/O de este año, Google anunció la posibilidad de incluir un control granular sobre que funciones pueden acceder las aplicaciones, para evitar que éstas requieran permisos indiscriminadamente. La gente de Android Police descubrió en el código fuente de Android 4.3 un administrador de permisos llamado App Ops, que apunta justamente a esta nueva funcionalidad.
Si bien App Ops no está activo - en teoría aún no está terminado - la aplicación permite dar y revocar permisos en forma selectiva para cada aplicación. Por ejemplo, es posible denegar acceso a la agenda o acceder al GPS a una aplicación que lo requiera sin fundamentos.
Los permisos granulares aún tienen algunos problemas por considerar. La denegación de un permiso a una aplicación puede derivar en resultados inesperados dentro de la aplicación, como por ejemplo no hacer recomendaciones en base a la localización, y el usuario normal podría verse en problemas ante tantos ajustes de bajo nivel.
Es posible que los permisos granulares lleguen a una nueva versión de Android en el futuro, aunque con cambios y precauciones que eviten descuidos y consiguientes problemas.