Tras un sin fin de rumores acerca de sus componentes, su fecha de anuncio, su fecha de lanzamiento, su localización de mercado, la solidez en en la propuesta de Samsung para con este smartphone, desde el Coloso Coreano han decidido hacer oficial sus intenciones de sacar a la venta su versión reciclada del Samsung Galaxy Note 7 sin ocultar el detalle de que en efecto es una movida ecológica.
El Samsung Galaxy Note Fan Edition (o Galaxy Note FE) tendrá nuevos colores y una batería más pequeña de 3200mAh por oposición a la enorme batería de 3500mAh del Galaxy Note 7, razón concreta para la desestabilización térmica que causara las explosiones. Por lo demás, el Samsung Galaxy Note FE es una versión idéntica pero más segura, asegura Samsung, que el Samsung Galaxy Note 7.
De momento, Samsung apunta a que el Samsung Galaxy Note FE sea un lanzamiento humilde y exclusivo en el mercado surcoreano. Tienen por objetivo alcanzar las 400 mil unidades vendidas y, posterior a eso, se evaluará la posibilidad de un lanzamiento en otros mercados. De todas formas, lejos está el Samsung Galaxy Note FE de ser un lanzamiento internacional con las aspiraciones y preparaciones que este requeriría.
El software y el control de seguridad que se aplicaron en el Samsung Galaxy Note FE son los mismos que los del más reciente smartphone de Samsung, el Galaxy S8/S8+. Por el reciclado, la inclusión de una nueva batería y las nuevas presentaciones en colores negro mate, azul claro, dorado mate y plateado el Samsung Galaxy Note FE tendrá un precio de lanzamiento aproximado de US$610, algo más caro de lo que habían hecho correr los rumores con anterioridad pero en el mismo espectro.
Desde el 7 de julio, el Samsung Galaxy Note Fan Edition volverá a las manos de los consumidores de Corea del Sur, esta vez domados, ya no inflamables y siendo la mejor phablet del mercado de Samsung hasta la llegada del Samsung Galaxy Note 8.