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Y un día volvieron los smartphones flexibles con dos displays: aquí está el ZTE Axon M

El 2017 transita sus últimas semanas y un nuevo contendiente se plantó firme justo cuando creíamos que la gloria se marcharía bajo el brazo de los mismos fabricantes como todos los años anteriores. Desde hace años se espera que alguno de los fabricantes de smartphones más exitosos del mundo se tomen en serio el lanzar un smartphone flexible y, aunque en esta oportunidad no se trata de Apple, Samsung o nombres de esa jerarquía, ZTE tampoco es poca cosa.

ZTE será la primera valiente en dar un paso hacia adelante y exponerse a las críticas por lanzar su Axon M, el primer smartphone flexible en muchos años. El ZTE Axon M tendrá dos displays IPS LCD de 5,2 pulgadas de resolución Full HD que se reunirán en el centro para formar una tablet con display de 6,8 pulgadas medido en su diagonal.

El diseño del ZTE Axon M es todo lo que se esperaba de un smartphone flexible en 2017: dos displays unidos por una bisagra que logra reunirlos en el centro para proyectar su contenido en dos pantallas verticales o en una pantalla a modo de tablet. Pero el ZTE Axon M parece querer ir más allá sacándole el jugo a las posibilidades de tener dos displays y una bisagra lo suficientemente resistente y rígida, pues el ZTE Axon M puede erigirse de forma tal que las dos pantallas proyecten la misma imagen en cada pantalla en modo panorámico y apuntando estas en opuestas direcciones para que dos personas puedan disfrutar de ver el mismo contenido.

ZTE estaría trabajando con las 200 aplicaciones más populares del mercado actual para optimizar su funcionamiento en el ZTE Axon M, pues este tiene una resolución pasa sus pantallas de 5,2 pulgadas y otra para la pantalla unificada de 6,8 pulgadas medida por su diagonal. Sin embargo, es posible que el ZTE Axon M sea una zambullida rápida en el mercado para probar la temperatura del agua y no mucho más. ¿Por qué? Pues porque las características que este smartphone tan innovador provee no son las de un flagship.

El ZTE Axon M tendría un procesador Qualcomm Snapdragon 821 trabajando a una frecuencia de 2,15GHz, el mejor procesador de la pasada generación. Este trabajaría con 4GB de memoria RAM, 64GB de capacidad de almacenamiento interno, una única cámara frontal con sensor de 12 megapíxeles, una batería de 3180mAh y la versión 7.1.2 de Android Nougat. Uno creería que si ZTE estuviese apostando fuerte a que el ZTE Axon M revolucione el mercado este tendría que haber propuesto características de hardware de última generación al mismo tiempo que este diseño tan vistoso. En su lugar, se conformará con especificaciones de smartphone de mediana a alta gama.

ZTE no ha dicho nada al respecto del precio de su ZTE Axon M, pero sí que 17 de noviembre deberíamos de estarlo viendo aparecer en Estados Unidos, Japón, China y varios países de Europa. El ZTE Axon M no se restringirá a estos mercados, pero sí los elegirá como escenarios de debut. ¿Qué grado de éxito estiman que tendrá el ZTE Axon M flexible?

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