La industria del smartphone rápidamente se esta comoditizando, con smartphones a bajo precio, prácticamente muy similares en especificaciones ofrecidas y una gran cantidad de fabricantes dispuestos a competir — pero eventualmente, muchos de ellos dejarán de hacerlo, debido a que pocos obtienen ganancias y Apple se queda con el 90 por ciento de las ganancias producidas por la industria.
Un reporte de Bloomberg asegura que Apple se queda con casi la totalidad de las divisas producidas por el negocio, con el resto dividido entre Samsung y un mar de fabricantes que apenas alcanzan el 1 o 2 por ciento y otros que directamente pierden dinero.
Es por eso que compañías como Sony, a pesar de lanzar smartphones excelentes en cuanto a prestaciones, están considerando salir directamente del mercado debido al rojo en sus balances y por el hecho de que cada tres smartphones venidos uno pertenece de Apple o Samsung, o el caso de HTC, alguna vez líder de la industria que hoy intenta reinventarse más allá de los smartphones mediante alianzas y proyectos paralelos, sin nombrar el caso de Nokia y su directa rendición.
Por supuesto, para Apple sigue siendo un negocio rentable, sobre todo dando la espalda al mercado de gama baja — que deja márgenes mucho más pequeños, ya que Samsung vende el doble de smartphones que Apple, pero muchos de ellos económicos y con poco margen — pero eventualmente la industria expulsará a varios de estos jugadores.
La situación se complica con fabricantes como Xiaomi, que dominan su mercado local dificultando la tarea de fabricantes que destinan millones de dólares al marketing sin resultados positivos.
Todo indica que el panorama podría cambiar fuertemente en los próximos años, y muchas compañías buscarán obtener ganancias de otro modo — tal vez con servicios asociados, con hardware más allá de los smartphones o simplemente dejando de fabricarlos.
Fuente: Bloomberg