Samsung Galaxy Note 8 vs. Samsung Galaxy S8/S8+
Cuando se habla del Samsung Galaxy S8 y de su potencial como smartphone se lo hace con las especificaciones y la apariencia del Samsung Galaxy S8+ en mente. Esto es porque para hablar de todo lo que es capaz un flagship hay que ser justos y referir a aquella variante o modelo que entregue lo mejor de sí para las pruebas de benchmarking y para la evaluación de los usuarios.
Sucede lo mismo con las comparaciones entre smartphones. ¿Qué diferencias existen entre el recién llegado Samsung Galaxy Note 8 y el Samsung Galaxy S8+? ¿Vale la pena comprar lo nuevo de Samsung? ¿Se justifican las diferencias de precio ? Como siempre, a la hora de las preferencias todo es subjetividad y siempre que cuenten con la holgura monetaria convendrá comprar aquel modelo con mejores especificaciones. Pero sí se puede contestar qué cosas los distinguen.
Desde el frente se puede apreciar que el Samsung Galaxy S8+ tiene vértices redondeados y un display Super AMOLED de 6,2 pulgadas y la primera mínima diferencia se asoma: vértices más puntiagudos, aristas más definidas y un display Super AMOLED pero de 6,3 pulgadas. Dando vuelta la página, Samsung aprendió de la considerable cantidad de críticas negativas que recibió la ubicación y forma de su sensor de huellas dactilares y, aunque repitió el alojamiento dorsal, esta vez cambió de forma y agregó relieve para ser más fácilmente distinguible.
Si el/la usuario/a tuvo la suerte de comprar su Samsung Galaxy S8+ proveniente de India, China o Corea del Sur, entonces quizá haya podido adquirir la variante con 6GB de memoria RAM, en cuyo caso, el Samsung Galaxy Note 8 no tiene nada nuevo que ofrecerle. Caso contrario, entonces los 6GB de memoria RAM estarán esperándolo allí en el nuevo smartphone de alta gama de Samsung. El caso es similar con el almacenamiento: el Galaxy S8+ propone 128GB en su versión exclusiva, pero 64GB en su versión estándar. El Samsung Galaxy Note 8 tiene esas dos variantes y una tercera de 256GB.
Samsung ya había manifestado cautela (y miedo) con la batería del Samsung Galaxy S8 dándole solamente 3000mAh. El Samsung Galaxy S8+ corregía ese temor por una batería más codiciosa: 3500mAh. El Samsung Galaxy Note 8 parece haber dado un paso hacia atrás en bravía y optó por jugar una carta más segura con sus 3300mAh.
La cámara trasera es quizá el departamento en el que las diferencias son más notorias. El Samsung Galaxy S8+ tiene una impresionante lente de 12 megapíxeles con apertura f/1.7, PDAF, flash LED dual y OIS, pero el Samsung Galaxy Note 8 aquí ha llegado a hacer la diferencia: cámara dual con dos sensores de 12 megapíxeles, uno de ellos es el mismo sensor del Samsung Galaxy S8+, pero el otro es un sensor con apertura f/2.4, también con OIS que funciona de complemento de detección de profundidades y agrega zoom óptico x2. Si lo suyo es la fotografía, no hay dudas de que el Samsung Galaxy Note 8 es una considerable mejor opción.
Teniendo en cuenta estas diferencias, quedará a criterio de los consumidores si valen la pena o no esos posibles más de US$150 que separa al Samsung Galaxy Note 8 de su primo de alta gama, el Samsung Galaxy S8+. También puede mencionarse que el Galaxy S8+ tiene una mayor variedad de colores, aunque sus presentaciones están disgregadas por el globo y el Note 8 todavía es muy joven para poder afirmar que no repetirá ese camino.