Los Google Pixel 5 y Pixel 4a 5G están un paso más cerca de anunciarse
Además de presentar el Google Pixel 4a su fabricante nos prometió otros dos smartphones para finales del 2020 y puede que finalmente esté acercándose su fecha de presentación oficial. En las pasadas horas, el Google Pixel 5 se certificó en la FCC y lo hizo junto al otro midranger que estamos esperando: el Google Pixel 4a 5G.
Se ha filtrado toda clase de información acerca de los próximos dispositivos móviles de Google pero finalmente obtenemos parte de esa información de fuentes oficiales. De acuerdo a la FCC, si bien el Pixel 5 y el Pixel 4a 5G tendrán acceso a conectividad 5G, solo un modelo del Pixel 5 contará con soporte para conectividad 5G mmWave de alta velocidad.
Google Pixel 5 tendrá cargado rápido inalámbrico y cargado inalámbrico inverso
La FCC certificó tanto al más potente de los próximos midrangers de Google como al sucesor del Pixel 4a y en ambos casos reveló detalles sobre sus especificaciones técnicas. Acerca del Pixel 4a 5G, por ejemplo, se indica que su conectividad 5G será del tipo sub-6Ghz, de menor velocidad y más compatibilidad de señal que la frecuencia mmWave.
El Pixel 5 se lanzaría con dos modelos: uno con compatibilidad de conexión 5G sub-6Ghz y otro con sub-6GHz y mmWave para garantizar mayor velocidad pero también un uso universal de este tipo de conectividad. Claro que, por el momento, la infraestructura necesaria está a varios años de alcanzar una cobertura internacional.
El Google Pixel 5 se certifica en la FCC revelando también que contará con tecnología de cargado rápido inalámbrico. No solo podremos cargar el Pixel 5 con un accesorio de carga inalámbrica como es debido, sino que podremos usar el dorso de este dispositivo para cargar otros accesorios con la misma propiedad.
Su certificación en la FCC y la del Pixel 4a 5G habla a las claras de un lanzamiento en Estados Unidos pero, fuera de ese país, se espera que ambos smartphones debuten en Alemania, Australia, Canadá, Francia, Irlanda, Japón, el Reino Unido y Taiwán. El resto del mundo tendrá que quedarse con las ganas de poder comprar de forma local un flagship de Google.