Cuando se dice que la competencia en el mercado de las telecomunicaciones es una de carácter feroz no es aserción casual. Samsung, Apple y Huawei manejan los grandes números de la escena, en especial el dúo reducido de Samsung y Apple. Hace unas semanas se pudo ver cómo Samsung monopolizaba la adquisición del Qualcomm Snapdragon 835, o cómo Samsung hacía negocios con Apple para repartirse la mayoría de los displays OLED. De esto último, ya se empiezan a ver las consecuencias y cómo afectan a la competencia.
Huawei es otro de los grandes superproductores de smartphones. Tiene un crecimiento monstruoso en China y ha dominado lo suficiente el mercado como para permitirse el lujo de bañarse tímidamente los dedos de los pies en las aguas de otros mercados. Naturalmente, con las características de crecimiento de una empresa como Huawei, la persecución por productos de mejor calidad y más competitivos es cada vez más pronunciada. En un escenario de tales magnitudes sería casi una catástrofe contar con poca o nula cantidad de un componente elemental, ¿no?
Pues bien, todo pareciera indicar que Huawei sufrirá una escasez de displays OLED producto de una polémica distribución de Samsung Display, empresa líder en producción de displays OLED. Según los números que figuran, Samsung se habría quedado con el 56% de la distribución de material OLED (porcentaje equivalente a 300 millones de unidades) y habría negociado el 14% para Apple (75 millones de unidades). OPPO y Vivo se llevarán 13% y 10% respectivamente (70 millones y 53,5 millones). ¿Para Huawei? El restante porcentaje: 7%, que son 37,5 millones de unidades.
Cómo fue que Huawei acabó con una porción tan chica de la repartición de este componente es posible que responda a malas negociaciones, aunque no hay que descartar una posible intencionalidad espuria de Samsung por perjudicar a la competencia más amenazante.
Esta cantidad de display OLED serán con los que cuente Huawei para todo su año de producción de modelos. Si tenía las esperanzas de lanzar un smartphone estrella con display OLED, tendrá que esperar a otra temporada porque no creo que 37,5 millones de unidades alcancen a cubrir las aspiraciones comerciales de Huawei.
Para empeorar la situación, la empresa LG Display, otra de las empresas líderes en fabricación de pantallas OLED, no finalizará su cargamento de display sino hasta 2018. Y, en el caso, de la empresa BOE Technology Group Co.Ltd, Huawei tendría que esperara que finalice su cargamento para 2020. Veremos cómo afecta en estos los planes de diseño de Huawei y cómo se repone de este duro revés.
Fuente: Digitimes
