El Coloso Chino de la Industria de Telefonía Móvil, Huawei, comienza el 2017 declarándole la guerra a su propia autocomplacencia. Cierto es que, después de buenas inversiones y mucho trabajo, Huawei ha conseguido mantenerse justo debajo de Apple y Samsung en ventas, conquistando en el proceso a la enorme mayoría del mercado chino, pero el éxito del pasado no es algo en lo que Huawei quiera concentrarse.
La empresa Huawei no ha dejado de crecer en los pasados años e incluso tiene un crecimiento estipulado del 42% para finales de este año. Sin embargo, fue el ligero freno en su crecimiento en el 2016 (creció el 32% en el 2016, un crecimiento equivalente a 75 mil millones de dólares, pero que palidece a juicio de sus ejecutivos frente al impresionante 37% gestado en 2015) lo que motivó los comunicados de Eric Xu, Jefe Ejecutivo, al respecto de la cultura y filosofía de trabajo de la compañía: "Para curar una enfermedad, es necesario tratar con la raíz del problema. El éxito del pasado no es un indicador confiable para el futuro, y una larga lista de metas alcanzadas puede terminar siendo meramente un epitafio".
Se esperaba que Huawei creciera a esta velocidad, pues recientemente se había lanzado en los mercados de Estados Unidos y Europa, pero el freno en su crecimiento no pasó ni por un segundo desapercibido para los ejecutivos de Huawei (incluso a pesar de que fue un fenómeno que le ocurrió también a muchas otras compañías fabricadoras de celulares).
Ciertamente, un cambio es necesario si Huawei aspira a continuar en la cima de competidores de este mercado tan volátil como lo es el de los teléfonos celulares. Pero habla solo maravillas de la empresa que evite a toda costa regocijarse en lo impresionante de sus conquistas pasadas y enfrente firmemente las estrategias que lo consolidarán en los años advenideros, sobre todo teniendo en cuenta los complicados años que nos rodean en materia de economía global.
Vía: AndroidCommunity