La industria electrónica china no tiene comparación con el resto del mundo, y lo que que en algunas partes del mundo es prácticamente inaccesible, comprar componentes electrónicos en China parece ser tan simple como ir al mercado a comprar verduras.
El youtuber Scotty Allen decidió probar las bondades de la oferta del mercado chino en partes de smartphones, con el objetivo de armar su propio iPhone 6s enteramente de partes conseguidas de vendedores chinos en la calle. Más allá de los resultados, el video es un interesante recorrido por los aspectos menos conocidos de la industria - incluso frecuentemente ocultados a propósito - en un terreno que se delinea entre lo legal y lo ilegal, y el acceso a las masas de equipos y tecnología hasta hace unos años limitado a grandes fábricas.
Cabe señalar que el experimento, si bien probado, llevó unos cuantos viajes a China al Youtuber, amén de prueba y error - como por ejemplo la locura de soldar su propio circuito lógico - para lograr finalmente un iPhone 6s que en teoría podría hacerse por unos 300 dólares.
Son casi 25 minutos de video, y en inglés, pero realmente vale la pena verlo.
