El lanzamiento del Apple iPhone 4S en China causó que la compañía deba suspender las ventas de su último smartphone en Beijing, por seguridad de sus vendedores. Los residentes de Beijing, en afán por conseguir un iPhone 4S comenzaron a formar fila por más de 12 horas antes de que las tiendas abrieran sus puertas.
La masiva concentración de gente hizo que el Sanlitun Apple Store tuviera que demorar su apertura, lo que provocó la ira de los compradores, al punto de que la seguridad de los empleados de Apple no pudo ser garantizada, cancelando subsecuentemente el lanzamiento. Esto provocó una serie de incidentes, con personas arrojando huevos y policía intentando restablecer el orden. Mira el video en la nota completa.