A veces, lo que decimos tiene consecuencias imponderables. Aunque el solo acto de pronunciarse al respecto de algo viene acompañado de la debida responsabilidad, lo que causamos con nuestros dichos es difícil de estimar. Es más que probable que las intenciones de Clay Bavor, vicepresidente del departamento de realidad virtual y aumentada, hayan sido las mejores, pero es posible que haya desatado una tormenta de especulaciones.
Para quienes hayan tenido la suerte de atender al evento de Google I/O, Clay Bavor allí pronunció que el próximo smartphone insignia de LG, que estaría saliendo este año, agregó, tendría soporte para Daydream VR. Y eso podría implicar una cantidad muy, muy probable de cosas.
Si revisamos el historial, todos los smartphones que presentan soporte para Daydream VR u otros dispositivos de realidad virtual vienen equipados con displays OLED. La razón es que los displays IPS LCD tienen más latencia de la recomendada para que la calidad de imagen de los dispositivos de realidad virtual corra con fluidez.
Clay Bavor (y el propio blog oficial de Google, luego), cuando hablaron del "próximo smartphone insignia de LG" no pueden estarse refiriendo al LG G6 porque este ya está lanzado. Eso deja como único candidato al próximo miembro de la serie "V".
Esta semana, una de las novedades más significativas era el aumento de inversión en la producción de pantallas OLED en LG, y el mismo solo podía explicarse si algún importante smartphone le estuviese demandando tal incremento de productividad. Y con LG confesando que aún estaban lejos de satisfacer las demandas de Apple en materia de displays OLED, la posibilidad de un smartphone con display OLED este año se volvió inmediatamente digna de consideración.
Cuando LG anunció su LG G6, posiblemente con intenciones de profundizar en los atractivos del smartphone, hicieron un especial énfasis en el ratio de aspecto 18:9, política que, de haber tenido alguna vez alguna intención de ser coherente, debería repetirse en el LG V30.
Por último, una de las especulaciones menos fundadas pero no por eso menos probables, es que el LG V30 tendrá un Qualcomm Snapdragon 835 en su interior. Deducible a partir de dos premisas: tiene igualar el Snapdragon 821 del LG G6, pero superarlo si pretende tener alguna chance de competir con el iPhone 8 que saldrá durante el segundo semestre; y es el mejor procesador para asegurar calidad de imagen fluida necesaria para aprovechar todo el juego que tendrá el display OLED para exprimirse.
Interesante lo que puede especularse a partir de una simple declaración y un manojo de rumores que venían flotando en el aire inconexos y no muy atractivos por sí solos, ¿verdad?
Fuente: Google Blog
