LG y Samsung tendrían intenciones de aumentar la producción de displays OLED
Las compañías de smartphone no solo consiguen superioridad de ventas diseñando los mejores smartphones del mercado. Para relacionar el diseño, la idea que quiere llevarse a cabo con la realidad, en la concresión existe el importante ejercicio de la negociación para conseguir los acuerdos comerciales necesarios con las empresas adecuadas en el momento indicado.
Uno de los componentes más codiciados en el mercado de smartphones de alta gama actual son los displays OLED. El fabricante más importante de estos displays es Samsung, seguido por LG. Pero mucho antes de que ambos se queden sin displays para vender, rumores de que ambos están invirtiendo aún más para acelerar y multiplicar la producción comienzan a surgir.
Samsung ha acordado la venta de la mayoría de sus displays ya producidos y LG aún espera para completar su cargamento. Samsung se aseguró un contrato jugoso con Apple para ser el proveedor oficial de pantallas OLED para su supuesto iPhone 8, y los rumores hablan de que LG será el proveedor oficial de Apple durante el año 2018.
Si los rumores se confirman, sería atípico que dos fabricantes aumenten las inversiones para sus producciones incluso antes de que concluyan (particularmente en el caso de LG). Pero tendría sentido si la mayor parte de estas inversiones fueran destinadas a acelerar la producción en lugar de localizarse en el aumento de volumen.
No obstante, a pesar de los rumores imaginando a LG y Samsung compitiendo férreamente entre sí, pero llevándose al mismo tiempo por delante al resto de las pequeñas y medianas fábricas productoras de displays OLED, nada es oficial y algunos aspectos de estos rumores comenzaron a ser desmentidos.
Estos mismos rumores, además, afirmaban que Samsung y LG planeaban construir plantas de fabricación de displays OLED en China, pero los sitios web The Investor y Global Times se pusieron en contacto con estas empresas, quienes habrían declarado que no tienen intenciones de extenderse a China para instalar nuevas plantas.
Los próximos meses y la demanda de pantallas OLED acabarán por resolver cuánto de estas inversiones fueron maquinarias inventivas de los rumores y cuánto fueron lecturas poco populares que resultaron ser ciertas.