Aparentemente, Microsoft no es tan confidente de que los fabricantes de hardware - comúnmente llamados OEMs - se mantengan fieles a Windows luego de que la empresa lance su propio tablet Microsoft Surface.
De acuerdo con de The New York Times, Microsoft aseguró en su reporte anual a la Comisión de Valores de USA que "nuestros dispositivos Surface competirán con productos fabricados por nuestros socios OEM, y podrían afectar su compromiso con nuestra plataforma". Esta declaración contrasta con las declaraciones del CEO de Microsoft, Steve Ballmer, quién aseguró que "la importancia de miles de socios que tenemos que diseñan y producen computadoras Windows no disminuirá".
Por supuesto, el temor más firme de Microsoft es que estos OEMs busquen alternativas mucho más económicas y más fáciles de abordar, como Chrome OS o Android, e incluso distribuciones Linux.