Nokia continúa su estrategia de vender featurephones para un mercado prácticamente desierto, lo que le permite tener ciertos ingresos que no fluyen de la misma manera en el segmento de los smartphones por mayor competencia. En esta línea, Nokia actualizó dos de sus featurephones más populares, el Nokia 130 y el Nokia 150.
Continuando el legado del Nokia 150 original que fue lanzado en el 2016 y tuvo una secuela en el 2018, la tercera generación del Nokia 150 llega por sobre todas las cosas con un nuevo diseño, aunque conserva la mayoría de sus especificaciones.
Entre ellas se destacan la pantalla QVGA de 2.4 pulgadas, una cámara VGA, batería de 1450 mAh que promete hasta 20 horas de conversación y 30 días de standby, radio FM, salida para auriculares, resistencia limitada al agua y soporte para ranura microSD.
Lamentablemente las opciones de conectividad para el Nokia 150 son muy limitadas, dependiendo solamente de la red 2G.
El Nokia 130 también es la tercera generación con el mismo nombre, y el cambio más significativo esta vez es un enorme parlante que ocupa la mitad del posterior del teléfono.
Esto significa que el Nokia 130 prescinde de cámara, conservando las mismas características del Nokia 150 en el resto.
El Nokia 130 y el Nokia 150 rondan los 50 dólares y se podrán conseguir pronto en varios mercados alrededor del mundo.