Las pantallas sensibles a la presión supondrían una revolución en cuanto a touchscreen. Imaginen tener una tercera dimensión para ingresar datos, las posibilidades son enormes. Gracias a un equipo de investigadores en el Reino Unido, estas pantallas no estarían tan lejos de ser una realidad, mediante una técnica llamada quantum tunneling, que es una delgada capa que detecta minúsculas presiones casi sin consumir energía y nada mientras no se utlice. El fabricante de pantallas Nissha - que tiene por clientes a LG y Nintendo - ya posee una licencia para la fabricación de estas pantallas y podrían llegar tan pronto como para Abril.