La semana pasada, una población minoritaria de usuarios del Samsung Galaxy Note 8 manifestaban tener serios inconvenientes con la batería de este dispositivo. En particular, el problema consistía en que cuando este flagship descargaba su batería por completo, la misma superaba ampliamente el período de recuperación de energía y, finalmente, acababa por no restablecerse nunca. Es decir, quienes descargasen por completo su Samsung Galaxy Note 8, a menudo acababan no pudiendo volver a encenderlo nunca más.
Este problema que a priori parecía solo manifestarse en el último flagship de Samsung, resultó no ser un fenómeno aislado, sino afectar también a las baterías del Samsung Galaxy S8, del Samsung Galaxy S8 Plus e incluso también a la de la tablet Samsung Galaxy Tab S3.
Aunque los problemas de Samsung y sus baterías no son un tópico raro en lo absoluto, parecía ser que Samsung estaba evitando dar declaraciones oficiales al respecto de las baterías defectuosas de sus Samsung Galaxy Note 8, pues los casos eran de una cuantía poco relevante como para considerar un problema de fábrica y no un inconveniente relativo a los métodos de cargado de las unidades afectadas. Sin embargo, al incrementarse los reportes y aparecer menciones de otros dispositivos implicados, Samsung decidió hacer expresa su opinión en un comunicado oficial.
Samsung declaró: "Claro, Samsung está tomándose en serio todos los reportes sobre este asunto con seriedad. Solo recibimos una muy pequeña suma de consultas de usuarios que pueden derivarse al sector de mantenimiento de cargado de baterías, y desafortunadamente solo podemos comentar más sobre este asunto si tenemos más información detallada acerca de los dispositivos afetados. Si tienen alguna pregunta sobre sus dispositivos, por favor comuníquense con el servicio al consumidor de Samsung...".
En otras palabras, Samsung aún no considera contar con la evidencia necesaria para admitir un defecto de fábrica ni mucho menos cuenta con la información para comprender de qué se trate este inconveniente y si responde a una misma causalidad. Mientras tanto, usuarios de dispositivos Samsung Galaxy Note 8, Samsung Galaxy S8/S8+ y Samsung Galaxy Tab S3 pagaron cientos de dólares por un producto de supuesta calidad prémium solo para recibir otro producto de Samsung con inconvenientes en sus baterías por segundo año consecutivo.
Samsung Galaxy Note 8
El Samsung Galaxy Note 8 es el sucesor del fallido Note7. Esta vez, Samsung adopta la pantalla Infinity del Galaxy S8, con 6.3 pulgadas a resolución 2960x1440. También debuta por primera vez con Samsung una cámara dual, y el Galaxy Note8 cuenta con una cámara dual de 12 megapixels con estabilización óptica de imagen compuesta por un segundo lente telefoto de 12 MP. El resto de las características incluyen 6GB de RAM, 64GB, 128GB o 256GB de almacenamiento interno, batería de 3300 mAh, soporte para el S Pen, cámara frontal de 8 MP y Android 7.1.1 Nougat.
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Samsung Galaxy S8+
El Samsung Galaxy S8+ es la versión de pantalla más grande del Galaxy S8, con una pantalla Infinity Super AMOLED dual-edge de 6.2 pulgadas y resolución QHD+, procesador Snapdragon 835 o Exynos 8895, 4GB de RAM, 64GB de almacenamiento interno, resistencia al agua IP68, carga inalámbrica, cámara Dual Pixel de 12 megapixels, cámara frontal de 8 megapixels con autofocus, lector de huellas dactilares, lector de iris, batería de 3500 mAh con soporte para carga inalámbrica, asistente inteligente Bixby y Android 7.0 Nougat.
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Vía: MS Power User