A mediados del 2010, Samsung anunció que tenía intenciones de alcanzar la marca de 10 millones de unidades vendidas del Samsung Galaxy S , y vaya que se lo tomó en serio. A lo largo de estos seis meses fuimos testigos de los números parciales de ventas que mostraban un avance impresionante y finalmente, Samsung logró alcanzar su marca.
Cuatro millones fueron vendidos en el mercado norteamericano, 2.5 millones en Europa y 2 millones en Corea del Sur. Las unidades restantes se repartieron en diferentes partes del mundo.
Claro que Samsung no solo se valió en el Galaxy S, un smartphone con una pantalla Super AMOLED de 4 pulgadas y procesador Hummingbird de 1GHz, sino también en una explosión global del sistema operativo Android, con un crecimiento sin precedentes comparado con años anteriores.
Samsung planea reemplazar a Nokia como el fabricante número uno para el 2014, un objetivo lejano y díficil, pero hay que aceptar que Samsung posee la convicción para alcanzarlo y no solo se basará en Android OS, sino también en Bada OS y Windows Phone 7 para realizarlo.
Via PhoneArena