Por causas de sobornos, malversación, entorpecimiento de la investigación criminal, transferencia ilegal de capitales al extranjero y falso testimonio, Lee Jae-yong o, como es más conocido en el mundo tecnológico, Jay Y. Lee, fue sentenciado a 5 años de prisión en un escándalo que muy posiblemente halle atrapada también a la ex-presidenta de Corea del Sur, Park Geun-hye.
Jay Y. Lee es acusado de haber pagado sobornos a la ex-presidenta de Corea del Sur para poder asegurarse una fuerte posición dentro del Grupo Samsung. La fiscalía tenía intenciones de conseguir una condena de 12 años de prisión, pero no pudo probarse que todo el dinero que se mencionaba tuviese destinos aviesos, acabando en una reducción de condena que llegó a 5 años.
Se espera que los abogados de Lee Jae-yong apelen la sentencia, pero las pruebas lo incriminan severamente. Lee habría obtenido favores económicos y políticos de la entonces presidenta de Corea del Sur, pero Song Woo-chul, abogado de Lee Yae-jong, se mantiene firme en que las pruebas presentadas no son suficientes para probar la culpabilidad de su cliente y cree con optimismo que podrán revertir el estado de la condena para eventualmente dejar limpio el nombre de Lee Jae-yong.
Por su parte, Park Geun-hye continúa esperando a que se resuelva su sentencia. Mientras tanto, el escándalo tiene a toda la sociedad enfurecida, lo que naturalmente deviene en la influencia popular que le conflicto tendrá en las resoluciones de la justicia, como suele suceder con conflictos mediáticos de este calibre.
Fuente: The Korea Herald