Recluida, más mencionada por su impresionante tecnología de imagen o por su involucramiento en la industria de los videojuegos que por su mercado de smartphones, Sony por fin ha decidido cerrar su etapa de lanzamientos mencionados durante la Mobile World Congress 2017. Así es, smartphones de mediana gama anunciados en febrero/marzo y prometidos para mayo, fueron lanzados a mediados de julio en un sitio de venta online.
El Sony Xperia XA1 Ultra está lejos de ser una mala oferta al precio de US$400. En términos de experiencia pura, el usuario difícilmente pueda notar diferencias sustanciales entre un smartphone como el XA1 Ultra o cualquier otro smartphone de mediana gama sin lector de huellas dactilares en su composición.
En un mercado en el que cada día en el que se demora un lanzamiento es un día de ventas perdido y un día más cerca del próximo lanzamiento que lo haga descender de categoría, anunciar un smartphone de mediana gama en marzo para lanzarlo cuatro meses después sin una de las funciones más requeridas y normalizadas del mercado en el que compite parece una decisión no propia de una compañía como Sony, pero sí de acuerdo con la lógica alienada de una empresa japonesa.
Bien es sabido que, en líneas generales, las compañías japonesas están más preocupados por los resultados puertas adentro que por su repercusión en otros mercados igual de importantes, pero lanzar el Sony Xperia XA1 Ultra a estas alturas es una crónica de un fracaso previsible. Claro, la lógica del consumidor a veces no se pliega a los comportamientos esperables del mercado, por lo que no sabremos qué tanto lamentará Sony esta decisión hasta no tener los números fríos en mano.
Vía: Pocket Now