WhatsApp sigue atacando la desinformación acerca del COVID-19
En tiempos de encierro y crisis mundial es especialmente importante que la información que nos llegue, sea cual sea el medio, lo haga con un grado de responsabilidad y control fáctico. WhatsApp no puede hacer mucho de lo segundo, pero intentará con lo primero. Así es que WhatsApp limita los mensajes redirigidos para prevenir una ola de desinformación.
Sea por ignorancia, credulidad, miedo, prevención o mala intención, es un hecho que a través de WhatsApp suelen desparramarse noticias falsas sobre el COVID-19. La popular aplicación de mensajería instantánea quiere ayudar a mantener tranquilos a sus usuarios y por eso cambiar su política con respecto a los mensajes redireccionados.
Solo podremos redirigir mensajes de a una persona a la vez
Originalmente, WhatsApp no presentaba limitaciones con respecto a la cantidad de usuarios que podían recibir nuestros mensajes redirigidos. Al ver lo mucho que esto facilitaba la desinformación y el spam, ese límite fue cambiado a cinco usuarios a la vez. Pero estos son tiempos complicados y WhatsApp vuelve a cambiar de parecer.
Para disuadir a conspiradores y amainar el impacto de teorías conspirativas, así como también para ayudar a combatir la paranoia generalizada, quienes quieran compartir información con otros contactos tendrán que tener la determinación para hacerlo de a un contacto a la vez.
Si bien esto no impide que se esparzan las llamadas "Fake News", sí impide que su diseminación sea fácil y exponencial. Que podrá parecer que no es mucho, pero lo es. Especialmente en tiempos en donde hay cada vez más usuarios utilizando a sus seres cercanos como fuente de información fidedigna.
A través de una última actualización que se encuentra ya siendo distribuida a todos los usuarios del mundo, WhatsApp limita los mensajes redirigidos para que puedan reenviarse de a un contacto por vez.
Cabe destacar que en su comunicado oficial los representantes de WhatsApp dejaron en claro que no creen que redirigir mensaje sea una cosa mala en sí misma. En lo absoluto.
Más bien creen en que limitar la velocidad a la que se esparcen mensajes que no escribe uno mismo, necesariamente, ayuda a mantener a WhatsApp como un espacio personal y cerrado.